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La solicitud fue hecha por el cabo primero, Ronald Francis, perteneciente a una policía de la Gendarmería Real de Canadá (GRC), tras argumentar que dicha sustancia le permite aliviar los síntomas vinculados al estrés postraumático generado producto de su trabajo.Un policía de Canadá se atrevió este jueves a solicitar permiso para fumar marihuana, tras argumentar que dicha sustancia le permite aliviar los síntomas vinculados al estrés postraumático generado producto de su trabajo, lo que no había logrado antes con antidepresivos. Su demanda suscitó numerosas y contrastadas reacciones.La solicitud fue hecha por el cabo primero, Ronald Francis, perteneciente a una policía de la Gendarmería Real de Canadá (GRC), quien declaró a la cadena pública CBC haber obtenido una autorización que le permite fumar cannabis (marihuana), pero que sus superiores rechazan que lo haga al menos durante sus horas de trabajo.
Agregó que sus superiores temen que dañe la imagen de la marca GRC, inquietud que también confesó el ministro canadiense de Justicia, Peter MacKay.
Francis tiene su puesto de trabajo en Nouveau-Brunswick (este) y la televisión lo mostró en un video reciente fumando en uniforme en el exterior del edificio de la GRC. El policía afirma fumar habitualmente tres porros al día en el momento de la comida, incluso si la orden le autoriza a un consumo mucho mayor.
?Es una gran elección moral para mi, porque la GRC y los tribunales parecen tan anti-marihuana que es algo difícil de aceptar y por tanto tomé esta decisión (de solicitar el permiso de fumar marihuana) por mi propia salud".
El comisario adjunto de la GRC, Gilles Moreau, declaró que la institución debía tomar en cuenta las necesidades médicas de sus empleados, a la vez que cuida los efectos de estos sobre los compañeros o las percepciones públicas.
"En ningún caso, un miembro que tiene autorización para tomar cannabis terapéutico debería llevar el uniforme rojo mientras lo inhala", afirmó al canal CBC. "Es algo que ciertamente no vamos a permitir o tolerar", añadió.
El cabo primero, Ronald Francis, ha sido de momento asignado a tareas administrativas y no porta armas.
Legalización de la marihuana gana aceptación
El pasado mes de octubre la encuestadora Gallup publicó un sondeo en el cual revela que el 58 por ciento de los ciudadanos estadounidenses con edades comprendidas entre los 18 y 49 años, se mostraron a favor de una posible legalización de la marihuana contra el 50 por ciento dos años atrás y solo un 12 por ciento en 1969.
Mientras que en Estados Unidos (EE.UU.) el impulso para legalizar el uso recreativo de la marihuana proviene de grupos comunitarios, en América Latina ese respaldo surge de altos funcionarios, lo que crea marcadas diferencias en la implementación de esas políticas, afirmó recientemente Ethan Nadelmann, fundador y director ejecutivo de Drug Policy Alliance (organización no lucrativa con sede en Nueva York).
La implementación de las políticas de uso de marihuana en Estados Unidos se lleva a cabo a nivel estatal o municipal, y en América Latina a nivel nacional, como en el caso de Uruguay, donde el consumo ya es legal yfue aprobado el proyecto de ley del oficialismo para despenalizar la producción y la venta.
No quedan dudas de que las políticas sobre legalización de marihuana en Estados Unidos "tienen un impacto en América Latina. Y lo mismo podría decirse de los matrimonios homosexuales", sostuvo Nadelmann.
teleSUR-AFP-AmericaEconomia.com/ba-GP