Cultivar cannabis en interior tiene muchas ventajas. En primer lugar le da la oportunidad de aprender los fundamentos de crecimiento de la marihuana y controlarlos de forma estricta (ya que se convierte usted en el responsable de la alimentación, el agua, el clima, la luz, etc que tienen las plantas). Otra ventaja es que le permite trabajar con variedades que rara vez prosperan al aire libre. Además es un pasatiempo muy gratificante.
Por contra, existen también inconvenientes: hay un alto consumo eléctrico, se genera mucho calor adicional, ruido, olores muy fuertes, etc.. Todo esto sin tener en cuenta que necesitará tener una habitación disponible o un armario de cultivo.
Uno de los problemas más comunes al cultivar en interior es controlar el espacio que ocupan las plantas, y aunque es inevitable que crezcan.. hay algunas cosas que se pueden hacer para ayudarle a controlar su desarrollo.
Cultivar plantas de marihuana densas, pesadas y consistentes
Para aprovechar al máximo el espacio es conveniente que las plantas sean todo lo densas, pesadas y consistentes como sea posible. El objetivo es minimizar la distancia entre nodos para potenciar el crecimiento lateral.
Partimos de la base de que no queremos plantas espigadas. Si son altas y delgadas no serán capaces de soportar el tamaño de los grandes y densos cogollos que vamos a producir. De no controlar la altura, tendríamos que ayudar a soportar el peso de los brotes y corremos el riesgo de que estiren demasiado y se acerquen peligrosamente a las bombillas. Todo esto es dañino para sus plantas y se traducirá en un menor rendimiento.
Como siempre, lo mejor es anticiparse. Sin embargo, si ya está padeciendo los problemas de un cultivo espigado, podemos realizar una poda con muchísimo cuidado. Queremos insistir en lo de muchísimo cuidado porque una gran cantidad de productores de marihuana profesionales sugieren evitar las podas por completo: una poda mal realizada (por ejemplo: antes de tiempo) puede afectar al flujo de las hormonas de la planta, incluyendo las auxinas. Las auxinas son parte del grupo de hormonas que coordinan y organizan la forma en que una planta se desarrolla. Si usted es capaz de aprender a gestionar y redistribuir estas hormonas lejos del tronco principal y hacia los tallos laterales, tendrá una excelente manera de frenar el crecimiento vertical de la planta, obligándola a crecer lateralmente.
Ahora, volvamos a las medidas preventivas. Si queremos evitar el estiramiento, necesitaremos saber cuál es su causa. La genética puede desempeñar un papel importante, pero es algo sobre lo que no tenemos control. Algo que sí controlamos son las condiciones del entorno, y sus principales factores son la luz y la temperatura. Es importante controlar estos factores desde el principio del cultivo y no solamente cuando se realiza el cambio de horas de luz.
Controlar la temperatura en su espacio de cultivo
La temperatura es muy importante. Incluso teniendo bien optimizada la iluminación, la planta podría estirar más de la cuenta por una temperatura incorrecta (lo ideal es que oscile entre los 23º y 28º C). Para controlarla es imprescindible tener un termómetro decente y llevar un registro de temperaturas máximas y mínimas. El cambio de temperatura entre el día y la noche es el factor principal en el desarrollo de internudos: a mayor oscilación entre día y noche (luz/oscuridad), mayor tendencia a estirar tendrán sus plantas.
La técnica de ajuste de temperaturas diurnas y nocturnas para controlar el crecimiento de una planta se conoce como técnica DIF (DIF significa "diferencia").
Cuando la temperatura del día es mayor que la temperatura de la noche el DIF es positivo. A mayor DIF, mayor distancia entre nudos.
Cuando las temperaturas nocturnas son más elevadas que las diurnas, el DIF es negativo. Con ello se reduce el crecimiento y la distancia entre los nudos de las hojas y tallos.
De hecho, la aplicación de un DIF negativo puede inhibir completamente el crecimiento de una planta. Los cultivadores comerciales y los agricultores a veces usan esta técnica para forzar ciertos cultivos a esperar, de manera que puedan cosechar todo al mismo tiempo. Es poco probable que usted necesite hacer esto, pero es una información es valiosa. Si usted decide retrasar el crecimiento de las plantas mediante la aplicación de un DIF negativo, tenga cuidado: la humedad puede aumentar rápidamente en una habitación con las luces apagadas. Asegúrese de que su cuarto de cultivo esté bien ventilado para no correr el riesgo de aparición de moho.
Una opción alternativa es lo que los americanos llaman morning pulse. Para utilizar esta técnica, deje que la temperatura en la sala caiga un par de grados durante las dos o tres primeras horas de luz, y luego mantenga un DIF positivo. Esto tendrá un efecto similar al del DIF negativo, pero no tendrá que preocuparse por un aumento de la humedad. La forma más fácil de aplicar esta técnica es mediante el uso de aire acondicionado o un ventilador de temperatura controlada.
Controlar la iluminación en su espacio de cultivo
Después de la temperatura, veamos la iluminación. En primer lugar, asegúrese de que tiene suficiente luz en su espacio de cultivo. Si las plantas no reciben suficiente luz, se estirarán buscándola. En un mundo ideal, cada uno de los brotes de cada una de las plantas deberían recibir la misma cantidad de luz y con la misma intensidad. Una iluminación correcta y equilibrada producirá densos cogollos en todo su cultivo.
Debe recordar que el poder y la intensidad de la luz disminuye exponencialmente con la distancia. Esta es la razón principal de que las plantas cultivadas en interior desarrollen cogollos menos densos en las secciones inferiores de la planta. La luz artificial no puede proporcionar el mismo poder a toda una planta.
Es habitual en los productores europeos, utilizar una lámpara HID de 600 vatios por cada metro cuadrado del espacio de cultivo. Esto es sin duda suficiente, pero debe ser consciente de algunos detalles. Asegúrese de que las bombillas están todo lo cerca de sus plantas como sea posible (sin quemarlas). Para disipar el calor puede utilizar reflectores cooltube, parabólicos, etc, pero no olvide mantenerlos limpios para que funcionen correctamente.
La distancia exacta desde sus plantas a la fuente de luz puede variar dependiendo del entorno, el equipo y la variedad de cannabis que se cultive. En principio podemos hablar de unos 85 a 100 cms desde una lámpara de 600w hasta un planta joven. Una vez que la planta madure, se puede reducir la distancia hasta unos 40-45 cms. Lo más sencillo para no equivocarse es poner la mano en la parte superior de la planta y comprobar la temperatura en sus propias carnes.
Prevenir el estiramiento indeseado en la marihuana
Otro factor a considerar es el espacio. No sobrecargar el espacio de cultivo es básico ya que debido al rápido crecimiento puede empeorar día a día y dar lugar a que las partes inferiores de las plantas no tengan suficiente luz.
Antes de empezar, dedique algún tiempo a planificar y organizar su espacio. ¿Quiere mucho espacio para todas sus plantas? Piense que ocuparán mucho más espacio a medida que se desarrollen y que además, el tipo de luz que utilicemos también afectará al crecimiento de las plantas.
El secreto está en anticiparse. Es mucho más fácil solucionar cualquier problema si tenemos margen de maniobra. Siempre es de esperar cierto estiramiento en las plantas, después del crecimiento inicial las plantas duplican el tamaño durante la floración. Asegúrese de tener suficiente espacio.
Conclusión
Si usted quiere en sus plantas un crecimiento controlado y sin espigamiento asegúrese de tener suficiente luz y no dejar que las temperaturas entre el día (luz) y la noche (oscuridad) fluctúen demasiado.
Por contra, existen también inconvenientes: hay un alto consumo eléctrico, se genera mucho calor adicional, ruido, olores muy fuertes, etc.. Todo esto sin tener en cuenta que necesitará tener una habitación disponible o un armario de cultivo.
Uno de los problemas más comunes al cultivar en interior es controlar el espacio que ocupan las plantas, y aunque es inevitable que crezcan.. hay algunas cosas que se pueden hacer para ayudarle a controlar su desarrollo.
Cultivar plantas de marihuana densas, pesadas y consistentes
Para aprovechar al máximo el espacio es conveniente que las plantas sean todo lo densas, pesadas y consistentes como sea posible. El objetivo es minimizar la distancia entre nodos para potenciar el crecimiento lateral.
Partimos de la base de que no queremos plantas espigadas. Si son altas y delgadas no serán capaces de soportar el tamaño de los grandes y densos cogollos que vamos a producir. De no controlar la altura, tendríamos que ayudar a soportar el peso de los brotes y corremos el riesgo de que estiren demasiado y se acerquen peligrosamente a las bombillas. Todo esto es dañino para sus plantas y se traducirá en un menor rendimiento.
Como siempre, lo mejor es anticiparse. Sin embargo, si ya está padeciendo los problemas de un cultivo espigado, podemos realizar una poda con muchísimo cuidado. Queremos insistir en lo de muchísimo cuidado porque una gran cantidad de productores de marihuana profesionales sugieren evitar las podas por completo: una poda mal realizada (por ejemplo: antes de tiempo) puede afectar al flujo de las hormonas de la planta, incluyendo las auxinas. Las auxinas son parte del grupo de hormonas que coordinan y organizan la forma en que una planta se desarrolla. Si usted es capaz de aprender a gestionar y redistribuir estas hormonas lejos del tronco principal y hacia los tallos laterales, tendrá una excelente manera de frenar el crecimiento vertical de la planta, obligándola a crecer lateralmente.
Ahora, volvamos a las medidas preventivas. Si queremos evitar el estiramiento, necesitaremos saber cuál es su causa. La genética puede desempeñar un papel importante, pero es algo sobre lo que no tenemos control. Algo que sí controlamos son las condiciones del entorno, y sus principales factores son la luz y la temperatura. Es importante controlar estos factores desde el principio del cultivo y no solamente cuando se realiza el cambio de horas de luz.
Controlar la temperatura en su espacio de cultivo
La temperatura es muy importante. Incluso teniendo bien optimizada la iluminación, la planta podría estirar más de la cuenta por una temperatura incorrecta (lo ideal es que oscile entre los 23º y 28º C). Para controlarla es imprescindible tener un termómetro decente y llevar un registro de temperaturas máximas y mínimas. El cambio de temperatura entre el día y la noche es el factor principal en el desarrollo de internudos: a mayor oscilación entre día y noche (luz/oscuridad), mayor tendencia a estirar tendrán sus plantas.
La técnica de ajuste de temperaturas diurnas y nocturnas para controlar el crecimiento de una planta se conoce como técnica DIF (DIF significa "diferencia").
Cuando la temperatura del día es mayor que la temperatura de la noche el DIF es positivo. A mayor DIF, mayor distancia entre nudos.
Cuando las temperaturas nocturnas son más elevadas que las diurnas, el DIF es negativo. Con ello se reduce el crecimiento y la distancia entre los nudos de las hojas y tallos.
De hecho, la aplicación de un DIF negativo puede inhibir completamente el crecimiento de una planta. Los cultivadores comerciales y los agricultores a veces usan esta técnica para forzar ciertos cultivos a esperar, de manera que puedan cosechar todo al mismo tiempo. Es poco probable que usted necesite hacer esto, pero es una información es valiosa. Si usted decide retrasar el crecimiento de las plantas mediante la aplicación de un DIF negativo, tenga cuidado: la humedad puede aumentar rápidamente en una habitación con las luces apagadas. Asegúrese de que su cuarto de cultivo esté bien ventilado para no correr el riesgo de aparición de moho.
Una opción alternativa es lo que los americanos llaman morning pulse. Para utilizar esta técnica, deje que la temperatura en la sala caiga un par de grados durante las dos o tres primeras horas de luz, y luego mantenga un DIF positivo. Esto tendrá un efecto similar al del DIF negativo, pero no tendrá que preocuparse por un aumento de la humedad. La forma más fácil de aplicar esta técnica es mediante el uso de aire acondicionado o un ventilador de temperatura controlada.
Controlar la iluminación en su espacio de cultivo
Después de la temperatura, veamos la iluminación. En primer lugar, asegúrese de que tiene suficiente luz en su espacio de cultivo. Si las plantas no reciben suficiente luz, se estirarán buscándola. En un mundo ideal, cada uno de los brotes de cada una de las plantas deberían recibir la misma cantidad de luz y con la misma intensidad. Una iluminación correcta y equilibrada producirá densos cogollos en todo su cultivo.
Debe recordar que el poder y la intensidad de la luz disminuye exponencialmente con la distancia. Esta es la razón principal de que las plantas cultivadas en interior desarrollen cogollos menos densos en las secciones inferiores de la planta. La luz artificial no puede proporcionar el mismo poder a toda una planta.
Es habitual en los productores europeos, utilizar una lámpara HID de 600 vatios por cada metro cuadrado del espacio de cultivo. Esto es sin duda suficiente, pero debe ser consciente de algunos detalles. Asegúrese de que las bombillas están todo lo cerca de sus plantas como sea posible (sin quemarlas). Para disipar el calor puede utilizar reflectores cooltube, parabólicos, etc, pero no olvide mantenerlos limpios para que funcionen correctamente.
La distancia exacta desde sus plantas a la fuente de luz puede variar dependiendo del entorno, el equipo y la variedad de cannabis que se cultive. En principio podemos hablar de unos 85 a 100 cms desde una lámpara de 600w hasta un planta joven. Una vez que la planta madure, se puede reducir la distancia hasta unos 40-45 cms. Lo más sencillo para no equivocarse es poner la mano en la parte superior de la planta y comprobar la temperatura en sus propias carnes.
Prevenir el estiramiento indeseado en la marihuana
Otro factor a considerar es el espacio. No sobrecargar el espacio de cultivo es básico ya que debido al rápido crecimiento puede empeorar día a día y dar lugar a que las partes inferiores de las plantas no tengan suficiente luz.
Antes de empezar, dedique algún tiempo a planificar y organizar su espacio. ¿Quiere mucho espacio para todas sus plantas? Piense que ocuparán mucho más espacio a medida que se desarrollen y que además, el tipo de luz que utilicemos también afectará al crecimiento de las plantas.
El secreto está en anticiparse. Es mucho más fácil solucionar cualquier problema si tenemos margen de maniobra. Siempre es de esperar cierto estiramiento en las plantas, después del crecimiento inicial las plantas duplican el tamaño durante la floración. Asegúrese de tener suficiente espacio.
Conclusión
Si usted quiere en sus plantas un crecimiento controlado y sin espigamiento asegúrese de tener suficiente luz y no dejar que las temperaturas entre el día (luz) y la noche (oscuridad) fluctúen demasiado.