Investigadores alemanes descubren que el estado de bienestar que alcanzan los ?runners? con el deporte y atribuido a las endorfinas, en realidad puede ser causado por el efecto de los endocannabinoides, que son sustancias producidas por el cuerpo muy similares a los cannabinoides de la marihuana.
El nuevo estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Medicina de Heidelberg (Alemania), encontró que los ratones mostraban niveles elevados de endorfinas y de endocannabinoides después de correr, una actividad que realizan por mera diversión. Observaron también que tras la carrera disminuía su ansiedad, su sensibilidad al dolor y estaban mucho más tranquilos. Prueba de ello es que se exponían voluntariamente a zonas iluminadas en vez de retirarse a rincones oscuros.
Posteriormente y con ayuda de drogas, el equipo bloqueó los receptores endocannabinoides de los ratones, comprobando que ya no se relajaban después de correr, que eran tan ansiosos como antes de la carrera y muy sensibles al dolor. El bloqueo de los receptores opioides, por el contrario, no afectó al estado de relajación de las criaturas tras el ejercicio.
No obstante, los receptores opioides internos parecen jugar algún papel en la motivación del corredor. Un artículo escrito por un equipo de la Universidad de Missouri describe hallazgos que muestran que la activación química producida por la liberación de dopamina en los receptores mu-opioides de las ratas las hace menos propensas a hacer ejercicio, lo que demuestra una relación directa entre los receptores y las ganas de correr.
"Estas ratas, altamente activas, corrían sobre sus ruedas sin parar", dijo Greg Ruegsegger, autor principal del artículo de la Universidad de Missouri. "Sin embargo, cuando químicamente activamos sus receptores mu-opioides, redujeron drásticamente su nivel de actividad. Dado que el ejercicio y la adicción a sustancias siguen el mismo proceso químico en el cerebro, es lógico pensar que la activación de estos receptores en personas con adicciones peligrosas podría ayudar a controlar su adicción?.
Una pregunta interesante del estudio realizado en Heidelberg es ¿cuánto necesitan correr los ratones para obtener esa sensación de bienestar?, dando como resultado un promedio de 5km al día. El líder del estudio, Johannes Fuss, declaró al New York Times que ?Reducir la sensación de ansiedad y dolor a través de las carreras de larga distancia es un beneficio también para los seres humanos? ya que también nosotros hemos evolucionado para movernos y recorrer largas distancias.
El nuevo estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Medicina de Heidelberg (Alemania), encontró que los ratones mostraban niveles elevados de endorfinas y de endocannabinoides después de correr, una actividad que realizan por mera diversión. Observaron también que tras la carrera disminuía su ansiedad, su sensibilidad al dolor y estaban mucho más tranquilos. Prueba de ello es que se exponían voluntariamente a zonas iluminadas en vez de retirarse a rincones oscuros.
Posteriormente y con ayuda de drogas, el equipo bloqueó los receptores endocannabinoides de los ratones, comprobando que ya no se relajaban después de correr, que eran tan ansiosos como antes de la carrera y muy sensibles al dolor. El bloqueo de los receptores opioides, por el contrario, no afectó al estado de relajación de las criaturas tras el ejercicio.
No obstante, los receptores opioides internos parecen jugar algún papel en la motivación del corredor. Un artículo escrito por un equipo de la Universidad de Missouri describe hallazgos que muestran que la activación química producida por la liberación de dopamina en los receptores mu-opioides de las ratas las hace menos propensas a hacer ejercicio, lo que demuestra una relación directa entre los receptores y las ganas de correr.
"Estas ratas, altamente activas, corrían sobre sus ruedas sin parar", dijo Greg Ruegsegger, autor principal del artículo de la Universidad de Missouri. "Sin embargo, cuando químicamente activamos sus receptores mu-opioides, redujeron drásticamente su nivel de actividad. Dado que el ejercicio y la adicción a sustancias siguen el mismo proceso químico en el cerebro, es lógico pensar que la activación de estos receptores en personas con adicciones peligrosas podría ayudar a controlar su adicción?.
Una pregunta interesante del estudio realizado en Heidelberg es ¿cuánto necesitan correr los ratones para obtener esa sensación de bienestar?, dando como resultado un promedio de 5km al día. El líder del estudio, Johannes Fuss, declaró al New York Times que ?Reducir la sensación de ansiedad y dolor a través de las carreras de larga distancia es un beneficio también para los seres humanos? ya que también nosotros hemos evolucionado para movernos y recorrer largas distancias.