Yo no he votao. No me había posicionao antes porque tampoco me apetecía decir a la gente que no votase, pero alguno de ustedes me lo ha echao veladamente en cara por privi, e imagino que algún otro podría preguntarse porqué alguien que le gusta tanto el fumeque no reclama su legalización. En resumen, porque la legalización para mi no es la otra cara de la moneda, sino mismo perro con distinto collar, pero eso es solo el comienzo. Voy a elaborar pa quien tenga un rato y le apetezca leerlo.
:
Se acaban las mafias.
Veamos este punto. Las mafias no se acaban nunca, sino que son grupos que entre otras actividades comercian con sustancias prohibidas y no prohibidas. Si excluímos el cannabis de sus mercados, podría ser un shock inicial, pero los más listos entre los mafiosos serían prestos a subirse al barco y pronto convertirían los productos de sus mafiosidades en dinerito limpio.
Exaltación de la libertad individual.
Este extremo de convivencia social tarda varias décadas en comprenderse, y para cuando se hace, se da uno cuenta que su único carcelero es uno mismo, y mucho más cruel e implacable con su reo de lo que uno se imaginaba. Mientras tanto, el uso de esta regla se aprecia en comportamientos adolescentes que no tienen nada de libre. No se pueden implementar ideas sin conocer sus consecuencias, por brillantes que estas aparenten ser. No se puede mover la ficha de ajedrez sin protegerla con otra.
Se venderá en coffee shops
Y puerta a puerta, por correo, por e-bay, de colores, baja en calorías, y se estabilizará cuando saquen la primera maría light que no coloca y haga furor.
Podremos plantar lo que queramos
Siempre y cuando dispongamos de un espacio adaptado, pasemos un control de seguridad, consigamos un permiso, utilicemos productos homologados, y en el caso de pretender vender los excesos, darnos de alta como autónomos, cumplir con una inspección sanitaria con sus correspondientes estudios técnicos y, aprovechando la novedad, todas las cuñas sacaperras que se les ocurran. Vuelvo a usar mi analogía favorita: La leche es legal, pero pocos tienen la vaca en casa.
Se regulará el mercado de semillas y se creará una comisión cualitativa.
Claro, como en el vino. Eso no quita que el que más se venda sea el puto donsimón. Igualmente, es posible que la demanda de esquejes disminuirá hasta círculos privados el mercado abierto de semillas. Las feminizadas y autoflorecientes perderán su actual relevancia.
Economía
Brutal abanico de posibilidades abanicables, pero sin un consenso pan-internacional o al menos interestatal a nivel europeo, un manantial en medio del río. Desde la revitalización de la agricultura, al procesamiento de derivados, pasando por la activación de servicios y especuladores de todos los ámbitos, no hablaríamos de pleno empleo, sino de escasez de mano de obra e incremento masivo de la inmigración, a la par que apostaríamos de nuevo por un producto con visos de temporalidad, como ya hicimos con el turismo y el ladrillo.
Se me ocurren muchas cosas más, y por eso abogo por la exclusión del thc del código penal, pero manteniendo la prohibición del mercado. Mantendría la limitación del consumo al ámbito privado y la posición actual sobre la apología de las drogas. Lo que entendemos nosotros por información es una bomba de relojería en las orejas de chavales de 15 años, razón por la cual dejé de postear en LM y no otra. Ahora voy a divagar:
Cuando murió Franco, vivimos de repente la época del destape, cuya máxima expresión se dió precisamente en señoras enseñando porcentajes más o menos escabrosos de sus atributos mamarios. Cierta revista picantona-picantona que se llamaba Lib, nos ofertó un trucaje de ni más ni menos Farrah Fawcett-Majors, nuestro Angel de Charlie favorito porque era rubia (hoy miras esa cara de cigarrillo y esa decoración cuché, rubismo de frasco con mechas y esas tetuchas monjiles y no te entiendes). Salió una tirada que se agotó inmediatamente de 500.000 ejemplares. Medio millón de revistas porno, compañeros, aquellos inviernos nevaba viscosamente, todo el mundo sabía lo que era un lamparón, las hembras pasaban del chador al liguero cual marica recién salido del armario, un mundo nuevo de posibilidades, en España se había levantao la prohibición de la jodienda.
Los niños hoy pasan mucho del porno bravo. Vale que tienen el internet, pero eso es un rato por la noche, el resto es jugar a los marcianos. Pero esta actitud despreocupada, exenta de pecado original y monstruosas amenazas sobrenaturales se debe a la libertad sexual, no a la sexualidad legalizada. Entendemos las leyes que versan sobre el sexo como de convivencia, aunque también están cada vez más politizadas.
Creo que si hoy se extrae el término thc del código penal, podríamos tener momentáneamente un periodo de colocón general, pero pronto la saturación haría su impecable trabajo y la grifa perdería gran poder de seducción en favor de otros entretenimientos, a la par que estabilizaría su presencia social sin mayor transcendencia.
Acabo. En cuanto al uso terapéutico, no es una opinión de ningún político, de hecho la postura actual es un crimen y figura en el código penal: negar auxilio. De momento se permite ligeramente el trapicheo por los hospitales y asociaciones de glaucómeros, esclerosénicos, sidárticos y canceristas en general. No basta, da exactamente igual quien tenga que perder cara por sacar el tema a relucir en el senado y las cortes o la zarzuela o la casa la puta la agüela, esto es un principio constitucional seriamente vulnerado, que de continuar así solo envía el mensaje de que la Constitución no tiene valor alguno y se interpreta con más ambigüedad que un lefevriano (?tan de moda) hace con la biblia. Queremos una aproximación más pragmática y matemática a ese libro, jefes, si no ya veréis lo que tarda en ponerse de moda la biblia lefreviana, porque p?al caso...
Por eso y por mucho más no voto por la legalización, y el argumento de que hay que abrir el debate como sea, a mi entender es la peor de las maneras. Raya con la utopía por el lao de fuera. Ahora bien, a ver qué cuenta Obama y como le acaban la frase los figurantes estos que pululan por nuestros edificios más emblemáticos. Salud.
:
Se acaban las mafias.
Veamos este punto. Las mafias no se acaban nunca, sino que son grupos que entre otras actividades comercian con sustancias prohibidas y no prohibidas. Si excluímos el cannabis de sus mercados, podría ser un shock inicial, pero los más listos entre los mafiosos serían prestos a subirse al barco y pronto convertirían los productos de sus mafiosidades en dinerito limpio.
Exaltación de la libertad individual.
Este extremo de convivencia social tarda varias décadas en comprenderse, y para cuando se hace, se da uno cuenta que su único carcelero es uno mismo, y mucho más cruel e implacable con su reo de lo que uno se imaginaba. Mientras tanto, el uso de esta regla se aprecia en comportamientos adolescentes que no tienen nada de libre. No se pueden implementar ideas sin conocer sus consecuencias, por brillantes que estas aparenten ser. No se puede mover la ficha de ajedrez sin protegerla con otra.
Se venderá en coffee shops
Y puerta a puerta, por correo, por e-bay, de colores, baja en calorías, y se estabilizará cuando saquen la primera maría light que no coloca y haga furor.
Podremos plantar lo que queramos
Siempre y cuando dispongamos de un espacio adaptado, pasemos un control de seguridad, consigamos un permiso, utilicemos productos homologados, y en el caso de pretender vender los excesos, darnos de alta como autónomos, cumplir con una inspección sanitaria con sus correspondientes estudios técnicos y, aprovechando la novedad, todas las cuñas sacaperras que se les ocurran. Vuelvo a usar mi analogía favorita: La leche es legal, pero pocos tienen la vaca en casa.
Se regulará el mercado de semillas y se creará una comisión cualitativa.
Claro, como en el vino. Eso no quita que el que más se venda sea el puto donsimón. Igualmente, es posible que la demanda de esquejes disminuirá hasta círculos privados el mercado abierto de semillas. Las feminizadas y autoflorecientes perderán su actual relevancia.
Economía
Brutal abanico de posibilidades abanicables, pero sin un consenso pan-internacional o al menos interestatal a nivel europeo, un manantial en medio del río. Desde la revitalización de la agricultura, al procesamiento de derivados, pasando por la activación de servicios y especuladores de todos los ámbitos, no hablaríamos de pleno empleo, sino de escasez de mano de obra e incremento masivo de la inmigración, a la par que apostaríamos de nuevo por un producto con visos de temporalidad, como ya hicimos con el turismo y el ladrillo.
Se me ocurren muchas cosas más, y por eso abogo por la exclusión del thc del código penal, pero manteniendo la prohibición del mercado. Mantendría la limitación del consumo al ámbito privado y la posición actual sobre la apología de las drogas. Lo que entendemos nosotros por información es una bomba de relojería en las orejas de chavales de 15 años, razón por la cual dejé de postear en LM y no otra. Ahora voy a divagar:
Cuando murió Franco, vivimos de repente la época del destape, cuya máxima expresión se dió precisamente en señoras enseñando porcentajes más o menos escabrosos de sus atributos mamarios. Cierta revista picantona-picantona que se llamaba Lib, nos ofertó un trucaje de ni más ni menos Farrah Fawcett-Majors, nuestro Angel de Charlie favorito porque era rubia (hoy miras esa cara de cigarrillo y esa decoración cuché, rubismo de frasco con mechas y esas tetuchas monjiles y no te entiendes). Salió una tirada que se agotó inmediatamente de 500.000 ejemplares. Medio millón de revistas porno, compañeros, aquellos inviernos nevaba viscosamente, todo el mundo sabía lo que era un lamparón, las hembras pasaban del chador al liguero cual marica recién salido del armario, un mundo nuevo de posibilidades, en España se había levantao la prohibición de la jodienda.
Los niños hoy pasan mucho del porno bravo. Vale que tienen el internet, pero eso es un rato por la noche, el resto es jugar a los marcianos. Pero esta actitud despreocupada, exenta de pecado original y monstruosas amenazas sobrenaturales se debe a la libertad sexual, no a la sexualidad legalizada. Entendemos las leyes que versan sobre el sexo como de convivencia, aunque también están cada vez más politizadas.
Creo que si hoy se extrae el término thc del código penal, podríamos tener momentáneamente un periodo de colocón general, pero pronto la saturación haría su impecable trabajo y la grifa perdería gran poder de seducción en favor de otros entretenimientos, a la par que estabilizaría su presencia social sin mayor transcendencia.
Acabo. En cuanto al uso terapéutico, no es una opinión de ningún político, de hecho la postura actual es un crimen y figura en el código penal: negar auxilio. De momento se permite ligeramente el trapicheo por los hospitales y asociaciones de glaucómeros, esclerosénicos, sidárticos y canceristas en general. No basta, da exactamente igual quien tenga que perder cara por sacar el tema a relucir en el senado y las cortes o la zarzuela o la casa la puta la agüela, esto es un principio constitucional seriamente vulnerado, que de continuar así solo envía el mensaje de que la Constitución no tiene valor alguno y se interpreta con más ambigüedad que un lefevriano (?tan de moda) hace con la biblia. Queremos una aproximación más pragmática y matemática a ese libro, jefes, si no ya veréis lo que tarda en ponerse de moda la biblia lefreviana, porque p?al caso...
Por eso y por mucho más no voto por la legalización, y el argumento de que hay que abrir el debate como sea, a mi entender es la peor de las maneras. Raya con la utopía por el lao de fuera. Ahora bien, a ver qué cuenta Obama y como le acaban la frase los figurantes estos que pululan por nuestros edificios más emblemáticos. Salud.
Comentario