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Montevideo, 13 nov Noticias de Salud.- Ante la inaplazable autorización de la venta y cultivo de cannabis en Uruguay, que discute estos días el Senado, ya han saltado las primeras alarmas acerca del potencial efecto de la combinación del uso de marihuana al volante o en el contexto laboral y su incidencia en el número de accidentes.El proyecto de ley ?prohíbe conducir bajo los efectos de la marihuana?, aclaró a Efe el médico y senador Luis Gallo, miembro del oficialista Frente Amplio y vicepresidente de la Comisión de Salud del Senado, donde se debate el proyecto.?El tope de marihuana permitida para la conducción es cero. Los conductores serán sancionados si se localiza la trascendencia en su organismo, libremente de la cantidad consumida?, aclaró Gallo.
La marihuana y los derivados del cannabis pueden causar ?transtornos en la percepción y el tiempo de reacción?, así mismo ?reducción de la percepción de la rapidez extrema y las habilidades motoras?.
Además incapacita ?para estimar objetivamente las distancias?, según recoge un estudio divulgado en 2007 por la Facultad de Psicología de la universidad española de Granada.
La alteración de estas potenciales, trasendentes para la conducción y el manejo de maquinaria, forma parte de los efectos de la marihuana en el organismo, que dependen de factores como ?la edad del usuario o la concentración de la droga?, puntualizó el Mandatario de la Comisión de Salud del Senado uruguayo, el así mismo médico Alfredo Solari, del opositor Partido Colorado.
?Se entiende por concentración de la droga el porcentaje de nanogramos de THC (tetrahidrocannabinol, el principio activo de la marihuana) por mililitro. A mayor concentración de THC, mayores efectos se producen?, aclaró Solari.
En este sentido, Gallo detalló que la marihuana de curso legal que el Estado uruguayo ambiciona trasferir en las farmacias, así mismo las semillas para el autocultivo, habrían una concentración máxima de THC recortada al 5 %.
En cuanto a la edad del cliente de la droga, Solari puntualizó que ?la edad media de principio del uso de marihuana en Uruguay se sitúa en rededor a los quince años? y advirtió que ?los perjuicios que estimula son más graves cuanto más joven es el usuario?.
Indicó que ?la marihuana estimula transtornos de aprendizaje?, lo que conduce a ?la repetición de años de escolaridad y el abandono prematuro de los estudios?.
Por su parte, Gallo manifestó enfáticamente que ?la ley sobre la marihuana va unida a una política de educación y prevención?, con el fin de ?reducir el uso?.
?En el proyecto curricular de los medios educativos se va a insertar una materia relacionada con las consecuencias del uso problemático de las drogas, para impedir el principio del uso?, detalló el senador oficialista.
Según Gallo, esta labor educativa insertaría así mismo la formación en la prevención de peligros laborales, en un país en el que se producen al año más de 50.000 siniestros laborales, según apuntes del Banco de Seguros del Estado (BSE) uruguayo.
?Se van a emitir unas pautas para que el Ministerio de Trabajo y el BSE acuerden acciones de salvaguardia del trabajador en conexión con el uso de la marihuana?, que alcanzarían pasar por controles de uso a los empleados, puntualizó.
En Uruguay, el uso de marihuana no está afliccióndo por ley, aunque sí su venta y cultivo.
El proyecto fomentado por el Mandatario José Mujica legaliza la compraventa y el cultivo de marihuana, y establece la creación de un ente estatal regulador que se facultará de emitir licencias y controlar la producción y la distribución de la droga.
Los usuarioes anticipadamente anotados obtendrán adquirir marihuana en farmacias fundamentalmente habilitadas, hasta un máximo de 40 gramos por mes, o cultivar en el hogar hasta seis plantas que produzcan no más de 480 gramos por cosecha.
Gallo presagia que el proyecto de regulación de la compraventa y cultivo de la marihuana se apruebe en el Senado ?en las primeras semanas de diciembre, y sin ninguna innovación? del texto aprobado anticipadamente en la Cámara de Diputados.
Tras su autorización legislativa, se aperturaría un período de 180 días para la reglamentación de la ley, que podría ingresar en vigor a mediados de 2014.
María Sanz
Fuente: Terra