Un nuevo estudio publicado por la revista J-Stage, y financiado por el Ministerio de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología de Japón, ha encontrado que los cannabinoides (THC, CBD y CBDV) fueron eficaces en el bloqueo de cierta enzima que se sabe que es la causante del cáncer, y se produce en grandes cantidades cuando se consumen cigarrillos.
Estos resultados sugieren que la estructura pentilresorcinol en CBD puede tener un papel estructural importante en la inhibición de CYP1A1 directa, aunque se requiere toda la estructura del CDB para la inhibición general, según los investigadores.
CYP1A1 es una enzima que no es peligrosa en bajos niveles, pero se produce en grandes cantidades cuando alguien fuma cigarrillos; en grandes dosis, la enzima se ha relacionado con el cáncer.
Los investigadores afirman que: En consecuencia, el CDB y sus compuestos relacionados, que son potentes inhibidores de la actividad de CYP1A1, sería tan útil como un compuesto de plomo en la quimioterapia contra el cáncer.