El cardenal emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, consideró que la marihuana es una de las drogas existentes; "no muy fuertes", que tiene usos medicinales desde hace muchos años.
"Sí es cierto que la marihuana es una droga no de las muy fuertes, hay otras drogas que están permitidas como el tabaco, el café y el alcohol".
En rueda de presa, el prelado reconoció que la marihuana ha sido utilizada como medicina desde hace mucho tiempo; "la marihuana tiene, desde hace muchos años aplicaciones en la medicina"; por lo que los legisladores podrían buscar algún "resquicio" en la ley para que pueda utilizarse como medicamento.
Sin embargo, Sandoval Íñiguez subrayó que permitir el uso legal de la canabis, puede significar abrir la puerta a otro tipo de drogas.
"La marihuana es una droga natural, es una planta, sí daña, pero lo que se está estudiando es que la marihuana ha sido paso para las drogas fuertes. Permitirla es abrir el camino para que se busque ir a la heroína, cocaína y cristales, drogas fuertes que arruinan el cerebro y vida del hombre".
Presente en Aguascalientes para las celebraciones por el Quincenario de la Virgen de la Asunción, el prelado emérito también fue cuestionado sobre los casos de pederastia en la Iglesia católica, a lo que respondió que ya hay una legislación muy concreta al respecto, además de que se han dado muestras claras de las acciones en contra de estos depredadores.
"Sí es cierto que la marihuana es una droga no de las muy fuertes, hay otras drogas que están permitidas como el tabaco, el café y el alcohol".
En rueda de presa, el prelado reconoció que la marihuana ha sido utilizada como medicina desde hace mucho tiempo; "la marihuana tiene, desde hace muchos años aplicaciones en la medicina"; por lo que los legisladores podrían buscar algún "resquicio" en la ley para que pueda utilizarse como medicamento.
Sin embargo, Sandoval Íñiguez subrayó que permitir el uso legal de la canabis, puede significar abrir la puerta a otro tipo de drogas.
"La marihuana es una droga natural, es una planta, sí daña, pero lo que se está estudiando es que la marihuana ha sido paso para las drogas fuertes. Permitirla es abrir el camino para que se busque ir a la heroína, cocaína y cristales, drogas fuertes que arruinan el cerebro y vida del hombre".
Presente en Aguascalientes para las celebraciones por el Quincenario de la Virgen de la Asunción, el prelado emérito también fue cuestionado sobre los casos de pederastia en la Iglesia católica, a lo que respondió que ya hay una legislación muy concreta al respecto, además de que se han dado muestras claras de las acciones en contra de estos depredadores.