25-06-2013 / 13:20 h EFE
La Policía Nacional ha detenido a un vecino de Chozas de Canales (Toledo) que cultivaba en un chalet alquilado 300 plantas de marihuana y guardaba en bolsas siete kilos de cogollos.
Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno, las investigaciones comenzaron el pasado mes de mayo, al sospechar que podría haber una plantación de cannabis sativa (planta de la que se obtiene la marihuana) en una vivienda unifamiliar de Chozas de Canales.
Las investigaciones realizadas por los agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Municipal de esa localidad, permitieron confirmar la existencia de una persona dedicada a la producción de esquejes, cultivo y venta de marihuana.
El inquilino de esa vivienda fue arrestado como presunto autor de un delito de tráfico de drogas.
Al registrar la casa se encontraron más de trescientas plantas de cannabis sativa y numerosas bolsas de plástico termo-selladas que contenían cogollos de marihuana por un peso total cercano a los siete kilos, así como instrumental necesario para el cultivo y procesamiento de la sustancia estupefaciente.
Con esta operación se desarticula un punto negro de venta de droga, al haberse desmantelado el laboratorio clandestino que el detenido había instalado en tres habitaciones del chalet y la plantación de marihuana, que era de grandes dimensiones.
La Policía Nacional ha detenido a un vecino de Chozas de Canales (Toledo) que cultivaba en un chalet alquilado 300 plantas de marihuana y guardaba en bolsas siete kilos de cogollos.
Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno, las investigaciones comenzaron el pasado mes de mayo, al sospechar que podría haber una plantación de cannabis sativa (planta de la que se obtiene la marihuana) en una vivienda unifamiliar de Chozas de Canales.
Las investigaciones realizadas por los agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de la Policía Municipal de esa localidad, permitieron confirmar la existencia de una persona dedicada a la producción de esquejes, cultivo y venta de marihuana.
El inquilino de esa vivienda fue arrestado como presunto autor de un delito de tráfico de drogas.
Al registrar la casa se encontraron más de trescientas plantas de cannabis sativa y numerosas bolsas de plástico termo-selladas que contenían cogollos de marihuana por un peso total cercano a los siete kilos, así como instrumental necesario para el cultivo y procesamiento de la sustancia estupefaciente.
Con esta operación se desarticula un punto negro de venta de droga, al haberse desmantelado el laboratorio clandestino que el detenido había instalado en tres habitaciones del chalet y la plantación de marihuana, que era de grandes dimensiones.